¿Cuál es el significado de las imágenes de Julio Cobos practicando su rutina física en un gimnasio? Es obvio que el objetivo es demostrar que Cobos se está entrenando, probablemente preparando. Interesante trabajo de marketing político sobre el vicepresidente de la Nación.
El psicólogo social Ricardo Rouvier sigue convencido de que la conferencia de prensa que organizó en la Quinta de Olivos para lucimiento de Cristina de Kirchner, el sábado 2, fue un éxito. También lo cree la Presidenta, y exhibe encuestas telefónicas provistas por media docena de consultoras que sostienen, con impunidad llamativa, todo lo contrario a lo que opina el público.
Ocurre que Néstor Kirchner se ha encargado de atiborrar a su esposa de estadísticas que apuntalen su ánimo. "Hay que mantener optimista a Cristina" fue la orden impartida, y el coro genuflexo aceptó marchar a contramano de los acontecimientos.
Sin embargo, Néstor Kirchner consiguió, en parte, su objetivo. Cristina luce dispuesta a tener un perfil público más elevado. Para el ex Presidente esa actitud es imprescindible para el paso siguiente, que es recuperar imagen positiva. Un disparate del santacruceño porque para ello Cristina tendría que lucir racional, probablemente autocrítica ante la opinión pública y, básicamente, modificar su enfoque sobre la mayoría de los temas.
Sin embargo, hace meses que Cristina renunció al cambio. Desde aquel fin de semana en El Calafate, luego de la victoria electoral, y al que no fue invitado Alberto Fernández (jornadas en las que, luego de una discusión importante y muy áspera, Néstor Kirchner consiguió que su mujer abandonara todas las promesas de cambio que, por ejemplo, el embajador Carlos Bettini había realizado al rey Juan Carlos I de España, y por eso el monarca movilizó a un empresario clave para que consiguiera adhesiones en Madrid).
Por lo tanto, no le queda otra alternativa a Néstor que continuar 'maquillando' el universo de Cristina con encuestas de Enrique Zuleta Puceiro, Analía Del Franco y otros, que más bien parecen elaboradas por el INdEC nada creíble de estos tiempos.
En tanto, Julio Cobos continúa con su muy cuidado marketing político, que luce mucho más oportuno y eficiente. Ya lo demostró con su incursión relámpago por el predio ferial de la Sociedad Rural Argentina, cuando nadie lo esperaba. El vicepresidente de la Nación construye su relación con la opinión pública exhibiéndose sencillo, hombre común y, en lo posible, sensato.
El más novedoso aporte a la imagen de Cobos lo preparó el canal de noticias C5N, de Daniel Hadad, considerado uno de los soportes comunicaciones del kirchnerismo. Sin embargo, C5N ya promociona un programa especial que será difundido el sábado a las 17, en el ciclo Con Estilo, que conduce Myriam Bunin, dedicado a presentar a Cobos en el gimnasio al que asiste diariamente.
Las cámaras de TV acompañaron a Cobos a su rutina de bicicleta, pesas y ejercicios varios, con algunas preguntas específicas sobre su estado físico que se intercalaron entre pesas y 'spinning'.
Para quienes dicen conocer de comunicación política, hay un mensaje irrefutable: el vicepresidente de la Nación se está entrenando. Probablemente, él se está preparando para algún desafío. El mensaje consiste en que Cobos está buscando su mejor performance.
Todo esto ocurre en días cuando abundan las especulaciones acerca del futuro de Cobos. Su regreso o no a la UCR. Sus diálogos con referentes sociales importantes, castigados o menospreciados por los Kirchner. Con grupos de medios de comunicación. Con líderes empresariales rehacios a la devaluación encubierta vía desdoblamiento cambiario conque sueña Néstor Kirchner, siempre que pueda apartar del Banco Central sin escándalo a Martín Redrado porque el economista se niega al más reciente disparate de Juan Lascurain, el presidente de la Unión Industrial que no repara en impactos inflacionarios ni fiscales con tal de conseguir sus mezquinos privilegios.
Ocurre que Néstor Kirchner se ha encargado de atiborrar a su esposa de estadísticas que apuntalen su ánimo. "Hay que mantener optimista a Cristina" fue la orden impartida, y el coro genuflexo aceptó marchar a contramano de los acontecimientos.
Sin embargo, Néstor Kirchner consiguió, en parte, su objetivo. Cristina luce dispuesta a tener un perfil público más elevado. Para el ex Presidente esa actitud es imprescindible para el paso siguiente, que es recuperar imagen positiva. Un disparate del santacruceño porque para ello Cristina tendría que lucir racional, probablemente autocrítica ante la opinión pública y, básicamente, modificar su enfoque sobre la mayoría de los temas.
Sin embargo, hace meses que Cristina renunció al cambio. Desde aquel fin de semana en El Calafate, luego de la victoria electoral, y al que no fue invitado Alberto Fernández (jornadas en las que, luego de una discusión importante y muy áspera, Néstor Kirchner consiguió que su mujer abandonara todas las promesas de cambio que, por ejemplo, el embajador Carlos Bettini había realizado al rey Juan Carlos I de España, y por eso el monarca movilizó a un empresario clave para que consiguiera adhesiones en Madrid).
Por lo tanto, no le queda otra alternativa a Néstor que continuar 'maquillando' el universo de Cristina con encuestas de Enrique Zuleta Puceiro, Analía Del Franco y otros, que más bien parecen elaboradas por el INdEC nada creíble de estos tiempos.
En tanto, Julio Cobos continúa con su muy cuidado marketing político, que luce mucho más oportuno y eficiente. Ya lo demostró con su incursión relámpago por el predio ferial de la Sociedad Rural Argentina, cuando nadie lo esperaba. El vicepresidente de la Nación construye su relación con la opinión pública exhibiéndose sencillo, hombre común y, en lo posible, sensato.
El más novedoso aporte a la imagen de Cobos lo preparó el canal de noticias C5N, de Daniel Hadad, considerado uno de los soportes comunicaciones del kirchnerismo. Sin embargo, C5N ya promociona un programa especial que será difundido el sábado a las 17, en el ciclo Con Estilo, que conduce Myriam Bunin, dedicado a presentar a Cobos en el gimnasio al que asiste diariamente.
Las cámaras de TV acompañaron a Cobos a su rutina de bicicleta, pesas y ejercicios varios, con algunas preguntas específicas sobre su estado físico que se intercalaron entre pesas y 'spinning'.
Para quienes dicen conocer de comunicación política, hay un mensaje irrefutable: el vicepresidente de la Nación se está entrenando. Probablemente, él se está preparando para algún desafío. El mensaje consiste en que Cobos está buscando su mejor performance.
Todo esto ocurre en días cuando abundan las especulaciones acerca del futuro de Cobos. Su regreso o no a la UCR. Sus diálogos con referentes sociales importantes, castigados o menospreciados por los Kirchner. Con grupos de medios de comunicación. Con líderes empresariales rehacios a la devaluación encubierta vía desdoblamiento cambiario conque sueña Néstor Kirchner, siempre que pueda apartar del Banco Central sin escándalo a Martín Redrado porque el economista se niega al más reciente disparate de Juan Lascurain, el presidente de la Unión Industrial que no repara en impactos inflacionarios ni fiscales con tal de conseguir sus mezquinos privilegios.
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